miércoles, 15 de mayo de 2024

Infinitos amores


Por Mariana Gil Jiménez

Cuando se habla de «familia», usualmente, hay una tendencia a homologarla al «hogar», entendido como ese ámbito conformado por varias personas que se eligen unas a otras, día a día, para sus vidas y constituyen un refugio, un lugar no solo físico, sino también emocional, donde reponerse del agotamiento y los conflictos; un espacio donde la empatía y la compasión van de la mano del respeto y la independencia de cada ser y se brinda, según corresponda en cada situación, ayuda y confianza, contención y vuelo, reforzando el amor hacia una misma y hacia las demás.

En la mayoría de los contextos sociales y culturales, esta amplia noción se ve reducida a una idea del «hogar» que equivale a una estructura familiar «prediseñada» (padre, madre e hija/hijo), cuya jerarquía recae sobre quienes ejercen las paternidades/maternidades y se sostiene mediante creencias y «lealtades» (las cuales, en muchas ocasiones, atentan contra el derecho de individuación de las hijas e hijos, en detrimento de su asertividad, integridad y autoestima), que se fundamentan en la consanguineidad de los vínculos.

Paradójicamente, si nos atenemos al primer concepto, descubriremos que no todas las personas consideran «hogares» a aquellas otras con las que comparten sus genes, es decir, a sus familias de origen; y, en cambio, sí perciben de este modo a amistades cercanas y lejanas, a perros, gallinas, árboles y plantas...e incluso, a personajes de libros. Representa un sesgo significativo, si no un error, por ende, aferrarse a la idea de una estructura de familia «original», «correcta», «verdadera», o «superior»; asimismo, referirse a las familias en términos exclusivamente biológicos nos lleva a restar nuestra inmensa capacidad de hallar hogares en otras relaciones y valorar como tales a un sinnúmero de personas.

martes, 14 de mayo de 2024

Eve, Catamarca y una historia de las luchas que sostienen al mundo

 

Eve en la cooperativa Los Caminantes.Fotos: Gastón Bejas y Agustín Lagos

Por Aime Sosa Pompa

A Eve me la presentaron en medio de las históricas luchas del pueblo catamarqueño, en Argentina, denunciando los verdaderos daños de la mega minería en esas tierras, que son pródigas en tradiciones ancestrales. También coincidió con los ya casi habituales días mediáticos de un presidente y sus agresiones a los derechos conquistados en esa nación por quienes se han unido a favor de las mujeres y en contra de las violencias y racismos.

Esta entrevista en exclusiva para la revista Mujeres nos pone al tanto de tales aconteceres y nos lleva a comprender por qué son vitales las acciones comunitarias para seguir sosteniendo el mundo y defender un territorio que sea realmente feminista, como mismo sueña Eve.

lunes, 13 de mayo de 2024

Tonguita es alegría, paz y amor por los niños y las niñas

 

Fotos: Yaciel Peña de la Peña

Por Danielle Laurencio Gómez

Yaima Guerrero es, en primer lugar, madre; luego, esposa, actriz, trabajadora y amante de la infancia. Tonguita es colores, alegría, paz, luz y amor para las niñas y los niños.

Estudiaba en la Escuela Profesional de Artes Plásticas del oriental territorio de Las Tunas y, en ese tiempo, comenzó a ir a la iglesia, gracias a la invitación de una amiga -tenía poco más de 16 años-, y allí había necesidad de trabajar para los más pequeños, actuar y pintar para ellos; “Fue así como mi tesis de graduación se convirtió en un libro de historietas infantiles, que más tarde presenté como espectáculo".

Así cuenta Yaima sus inicios y cómo en la iglesia le dieron la misión de convertirse en payasa para una actividad y hasta le asignaron el nombre, Tonguita, lo que hace creer que aun cuando no imaginaba dedicarse a esta faceta, hubo algo o alguien que la eligió.

domingo, 12 de mayo de 2024

¡Feliz día, Mamá!


Por Marilys Suárez Moreno

Cuando Mayelin supo que estaba embarazada sintió que el mundo se le venía encima. Estaba en el último año de su carrera y trabajaba en una oficina de Telecomunicaciones. Pensó que le iba a resultar todo muy difícil y no sabía si podía asumirlo como deseaba.

Hoy, sus dos hijos cursan la escuela primaria y ella, salvo las correspondientes Licencias de Maternidad, concluyó su carrera y nunca dejó de trabajar. Cierto que su esposo participa en los cuidados y educación de sus hijos a la par que ella, y que su madre y su suegra la han sacado alguna que otra vez de apuros.

Por un mundo sin violencias


Por Gabriela Orihuela

En las calles habaneras ondearon las banderas de la diversidad y de Palestina. Entre alegría, bailes y carteles, se manifestaron cubanos y cubanas por los derechos de todas las personas y, además, por el cese del genocidio en Palestina. La Conga contra la Homofobia y la Transfobia, liderada, como cada año, por el Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), resultó un espacio de confirmación y lucha.

Anaclara León, socióloga de profesión que labora en el Instituto Cubano de Investigación Cultural «Juan Marinello», y Anabel Antuña, también socióloga, profesora de la Universidad de La Habana e integrante del claustro de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), desfilaron junto a activistas, líderes de instituciones y personas del colectivo LGTBIQA+ .