Por Marilys Suárez Moreno
Por Marilys Suárez Moreno
Visitar sistemáticamente la escuela, estar al tanto de las dificultades de nuestros hijos e hijas y ayudarles a enfrentarlas, así como orientarles en las tareas y trabajos de clase, resulta vital para la relación escuela-familia.
Por Marilys Suárez Moreno
Este pensamiento, más que una advertencia, parece presagiar un mundo de amenazas ante los cambios abruptos que se le avecinan al niño o niña con el arribo al nivel secundario.
Algunos padres y madres se expresan con frases como las expuestas porque piensan que con el ingreso del hijo o la hija a la enseñanza media, se sentirán más liberados de su tutela; digamos que menos involucrados con la nueva etapa que comienza. Por aquello de la ganada independencia, existe la creencia generalizada de que el tránsito al nivel secundario de la escuela transforma, por así decirlo, la vida del menor.