Por Marilys Suárez Moreno
No, no estamos conmemorando su fecha fundacional, ni el Día Internacional de la Mujer ni ninguna otra efeméride a tono, porque cualquier día resulta el adecuado para celebrar, conmemorar, honrar o agradecer, y siempre resulta oportuno reconocer a quienes han sido testimoniantes de nuestro crecimiento como mujeres y la organización que las rige desde el 23 de agosto de 1961.
Las mentiras y las falsedades circulan por todo el ciberespacio disfrazadas o no. Se busca confundir, atizar el fuego de las carencias e insuficiencias cotidianas, desconociendo o ignorando, eso sí, que el bloqueo, como sanción particularmente genocida, forma parte de nuestra cotidianidad. Ese tipo de cerco, apretado hasta la asfixia, impacta negativamente en nuestra vida diaria, particularmente, en las mujeres y sus familias.
Incluso se ha pretendido negar la existencia de la Federación de Mujeres Cubanas como la organización de masas que agrupa a las mujeres de todo el país. Esa que fue fundada hace 64 años por Vilma Espín a instancia de Fidel y que hoy es una red social real y contemporánea con basamentos suficientes para formar parte esencial de nuestras vidas, haciendo su propia historia, que es la de las mujeres todas.