El Día Internacional de la Mujer es una fecha especial y hasta recurrente para quienes son esencia de vida.
Por Marilys Suárez Moreno
Desde que la insigne y valiente camagüeyana Ana Betancourt alzara su voz en la tribuna de la Asamblea Constituyente reunida en Guáimaro, Camagüey, en 1869 para reclamar públicamente los derechos de la mujer, hasta hoy día, las cubanas han sido un factor de primer orden en las luchas históricas de nuestro pueblo.
Pasarían 20 años desde la celebración en 1911 del primer 8 de marzo en Dinamarca, Austria, Alemania y Suiza, para que Cuba acogiera la fecha, sin carácter público.
Fue en 1934 que se pudo celebrar nuestro primer 8 de marzo. Ocurrió en el salón de actos del Centro Obrero de Cuba, en Revillagigedo número ocho, en La Habana Vieja, gracias a la gestión de un grupo de entusiastas mujeres que, arrostrando persecución y cárcel, hicieron posible la celebración primera de la fecha.