Por Aime Sosa Pompa
Son muchos los retos que trae el 2024 para las acciones y respuestas concretas ante las violencias basadas en género. Precisamente entre las normativas cubanas vigentes, que desbroza un camino por donde ya vamos con todo ánimo y viveza, está el Protocolo de Actuación ante Situaciones de Discriminación, Violencia y Acoso en el Ámbito Laboral. Además de ser el primero de su tipo, es un valioso instrumento, un mecanismo legal exhaustivo y un documento esclarecedor ante todo aquello que sea lesivo a la dignidad humana.