Por Aurika Rubio
Comienza un nuevo año y es importante hacer algunas reflexiones sobre lo que hemos hecho y nos queda por crear con y por la familia. En ella se aprende a comunicarse, cómo comportarse, modales y los principales valores que acompañan durante el crecimiento y desarrollo de las personas; también es fundamental en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Según la sociología y la psicología social, “la confianza es la creencia en que una persona o grupo será capaz y deseará actuar de manera adecuada ante una determinada situación y pensamientos”.
Para ello debemos forjar hábitos que funcionen dentro del núcleo familiar, lo cual sólo se conseguirá a base de esfuerzo y constancia. Esas costumbres son:
· Compartir.
· Tolerancia.
· Flexibilidad.
· Respeto.
· Honestidad.
· Perdón.
· Generosidad.
· Comunicación.
· Socialización.
Disfrutar todos juntos de estas prácticas nos ayudan a robustecer lazos afectivos, a cimentar sentidos de pertenencias y seguridad para que cada integrante se sienta a plenitud.
Una vida en familia es compartir con otros integrantes, es interesarse en los problemas que surjan y buscarle soluciones colectivas, es comer juntos y saber cómo ha sido el día, es tener interés por el desarrollo profesional de cada uno, compartir con familiares algún hobbie o actividad, construir rituales… en fin, sorprender con acciones diferentes a las rutinarias hará una vida en familia más placentera.
Las fortalezas y debilidades internas de nuestra familia son las que no dependen de ningún factor externo, sino solo de nosotros mismos; por ejemplo, ser cariñosos o respetuosos, como fortalezas o mostrarnos impacientes o intolerantes, como debilidades.
¿Cuáles son los errores que destruyen la familia?
· Los insultos y las críticas en las relaciones familiares.
· El chisme.
· La falta de inclusión.
· El engaño y las mentiras destruyen las relaciones familiares.
· La falta de aceptación de diferencias.
· No perdonar o pedir perdón.
Ninguna familia es perfecta, todas en algún momento tienen que resolver situaciones que se presenten, pero para ello debes ser atinado, juicioso y responsable y poner en práctica de forma inteligente alguno de los consejos dados en estas líneas.
Entonces, esbocemos para el nuevo año fortalecer la familia, hacer de ella un núcleo importante para el desarrollo de la sociedad, con buenos principios. Forjemos una familia trabajadora, honrada, y respetuosa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario