martes, 4 de junio de 2024

Obbinisa Ashé: mujeres con suerte, defensoras de la rumba

 

Obbinisa Ashé defiende lo femenino dentro de un mundo tradicionalmente reservado para el sexo masculino. Modesto Gutiérrez Cabo


Por Yohandra Gómez Amaró

Obbinisa Ashé ─mujer con suerte o con gracia en lengua yoruba─ resulta la única agrupación de su tipo, defensora de la rumba, en la provincia de Cienfuegos. Con más de 30 años de fundado, el conjunto destaca por resaltar lo femenino en un ámbito tradicionalmente reservado para el sexo masculino.

Provenientes del mundo del cabaret y los espectáculos, Elizabert Oquendo Otero, Indira Montenegro Ruiz y Adonais de Armas, bajo la guía de Héctor Hidalgo Mederos, crearon el colectivo aficionado el 30 de agosto de 1992 y recibieron los primeros consejos de los percusionistas de los grupos folclóricos de aquel entonces.

Desde su fundación rompieron estereotipos y poco a poco las integrantes conquistaron un lugar cimero entre sus similares en el territorio centro-sureño, pero ¿qué ha distinguido a Obbinisa Aché dentro del panorama sonoro de esos dominios de Cuba?


Elizabert Oquendo Otero, fundadora y actual directora de Obbinisa Ashé.

“Comenzamos en la Casa de Cultura Benjamín Duarte a mostrar las riquezas de los ritmos afrocubanos y asumimos el toque de los tambores batá abbericulá porque, según numerosas investigaciones, los de fundamento solo los utilizan los hombres en ceremonias religiosas”, confesó Oquendo Otero, actual directora.

“Cuando empezamos, primero usábamos música grabada, entrábamos al escenario bailando y arrancaba entonces la actuación en vivo. Sucedía algo muy curioso y es que el público se quedaba esperando a que llegaran los varones a tocar los batá, pero aun así disfrutaban del espectáculo. No era costumbre ver a las mujeres en esos roles.

“Cultivamos el yambú, el guaguancó, los pregones cubanos del solar, temas de palo mayombe y para los Orishas, siempre con la idea de reflejar lo femenino con un estilo propio, desde el vestuario, las poses, los gestos, las expresiones faciales, sin imitar la ejecutoria tradicional de los hombres”, expresó.

Al principio solo eran tres, pero el esfuerzo que conllevaban las actuaciones las impulsó a buscar nuevas integrantes, hasta llegar a las ocho que hoy bailan, cantan y tocan los instrumentos al unísono, lo cual exige una preparación diaria.

Oquendo Otero subrayó que el montaje y ejecución de las coreografías resulta un proceso difícil, porque “es preciso controlar la voz, los pasos, el tiempo; hay que tener mucha "bomba", como decimos los cubanos, pero lo logramos.

“Espero que la Obbinisa perdure y, aunque en el futuro yo no esté, aspiro a que el legado se mantenga vivo y siga marcando la diferencia; que las mujeres continúen salvaguardando la música folclórica, sobre todo la rumba, declarada Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura en 2016, destacó.


La agrupación tiene dos peñas fijas: una en el Museo de las Artes Palacio Ferrer y la segunda en la galería Santa Isabel.

En estas tres décadas de vida artística, la agrupación trabajó para el turismo nacional e internacional en hoteles como Meliá Varadero, Meliá Las Américas, el Parque Josone, todos en el principal balneario de sol y playa, en Matanzas; el Jagua, Pasacaballos, Punta Las Cuevas, el complejo Rancho Luna-Faro Luna, en Cienfuegos; y Las Cuevas, de Trinidad, entre otros.

Participaron en los festivales PerCuba ʼ96 y en la Fiesta del Caribe de Santiago de Cuba, pero el quehacer de Obbinisa se enrumba también hacia lo social, mediante sus intervenciones en casas de abuelos de la ciudad cabecera de la Perla del Sur, el hogar de niños sin amparo familiar y otros espacios.

Actualmente tienen dos peñas fijas: el tercer sábado de cada mes en el Museo de las Artes Palacio Ferrer y el cuarto sábado en la galería Santa Isabel, donde el público puede disfrutar del arte creado por Obbinisa Ashé, perteneciente a la Empresa Provincial Comercializadora de la Música y los Espectáculos Rafael Lay.

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