Por Aurika Rubio
Los primeros asomos de joyas proceden de África. Existen piezas del Paleolítico superior que demuestran que los hombres de Cromañón elaboraban collares y brazaletes de huesos y dientes, así como piedras que colgaban en trozos de cuerdas y de huesos tallados, para abrochar sus prendas.
Este complemento es mucho más antiguo que otros más comunes, como es el brazalete y el anillo. En culturas como la egipcia y la mesopotámica, los collares de amuletos eran populares para alejar el mal de ojo y brindar protección espiritual. Los griegos limitaron su uso a las mujeres.
Los collares no son solo piezas de joyería, son accesorios de estilo personal y expresiones únicas de los gustos de cada persona. Cada tipo de collar cuenta su propia historia y aporta un carácter único a tu atuendo.
Tipos de collares
Los más conocidos son:
Collar princesa: elección atemporal que se acomoda de manera perfecta justo debajo de la clavícula.
Gargantilla: destaca la línea de cuello de manera elegante. Da toque moderno y audaz.
Matiné: descansa justo sobre el escote superior. Este collar es versátil y puede usarse tanto para eventos formales como para ocasiones más relajadas.
Ópera: Se extiende por debajo del pecho con una sola hebra larga o en capas.
Lavaliére: Suele ser una pieza colgante en forma de lazo o corbata, lo que da un aspecto romántico.
Collar lariat: con su diseño de nudo permite diversas formas de uso. Puede llevarse como collar corto o con lazo, lo que permite adaptar el estilo según el día y la ocasión.
Babero o peto: diseñado para cubrir una gran parte del pecho.
Collar de cuerda: una manifestación del estilo bohemio y relajado. A menudo hecho de materiales naturales, como cuero o cordón, y decorado con cuentas, conchas marinas o elementos tribales.
Sautoir: tipo de collar largo, que a menudo contiene adornos colgantes.
Collar rivière: elección elegante que presenta una fila continua de piedras preciosas o perlas.
En la actualidad, los más llevados son las gargantillas y los collares ceñidos al cuello, que vuelven a estar de moda este 2024. Se popularizaron en los años noventa y ahora están de vuelta, aunque con otros ajustes
Otros usos
Hay otros usos del concepto de collar. Al aro que se ajusta el cuello de un perro o un gato también se le llama collar y se utiliza para sujetarlo e impedir que se pierda o escape. En tanto, el que se usa como protección se coloca en el cuello de la mascota para evitar que se lama una herida o se quite un vendaje.
En las aves, el collar es la franja de plumas que algunas especies presentan en el cuello. Esas plumas son de un color diferente a las del resto del cuerpo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario