Embajador de Palestina en Cuba reclama un “cese al fuego”

 

Por Gabriela Orihuela

Ante medios de prensa nacionales y extranjeros, compareció Akram Samhan, embajador de Palestina en Cuba, para dar detalles de la compleja situación que vive en la actualidad este pueblo.

Desde el 7 de octubre último, cuando el grupo palestino Hamás lanzó un ataque sorpresa contra Israel, hasta la fecha, el conflicto entre ambas naciones ha cobrado la vida de miles de civiles en la Franja de Gaza.

De acuerdo con el embajador, “se trata de una nueva catástrofe”, ya que la guerra “en contra de nuestro pueblo no comenzó hace dos semanas, es una batalla que se extiende desde 1948”.

Las cifras de pérdidas de vidas humanas, de desaparecidos y desaparecidas comentadas por Akram Samhan dejan, como es de esperarse, un sentimiento atroz: 6 546 personas muertas –entre ellas más de 2 744 niños y niñas–; 1.600 debajo de los escombros –entre ellas 600 niños y niñas–; 17 439 heridas y un millón desplazadas hacia el sur de la Franja de Gaza. Pero también existen otras 600.000 personas en centros hospitalarios y escuelas del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para Refugiados de Palestina (UNRAW).

Además, “hay 25 centros escolares, 32 mezquitas y tres Iglesias destruidas, una de estas es la tercera ortodoxa más antigua del mundo; se contabilizaron 45 médicos, paramédicos y más de 50 funcionarios de la UNRAW fallecidos; tres hospitales están fuera de servicio y tenemos la noticia de que todas las instituciones médicas de la Franja de Gaza, especialmente las de la zona norte, van a parar en unas horas debido a la insuficiencia de petróleo”.

“Israel no ha respetado ninguno de los acuerdos pactados con Palestina. No acepta ni respeta que existe un pueblo con identidad propia, como tampoco la legalidad internacional. Sólo quiere más usurpación de tierras, más asentamientos, más matanzas y más invasiones. “Gaza está sin agua, sin petróleo y sin electricidad. Israel quiere esos 28 mil kilómetros cuadrados que es Palestina histórica”, aseveró el representante de esa nación árabe.

Se trata de una limpieza étnica y, en tal sentido, Akram Samhan aseguró que no van a dejar que eso suceda. “Necesitamos, de inmediato, un cese el fuego. La sangre que se está derramando es nuestra sangre, la de nuestro pueblo. Queremos, además, que se permita la entrada de las ayudas humanitarias. Queremos una solución del conflicto según la legalidad internacional. Queremos un estado palestino con su capital (Jerusalén) y el retorno de los refugiados”.

El embajador de Palestina agradeció toda la ayuda internacional y reconoció la solidaridad con su pueblo por parte del Grupo 77 + China y de todos los estados árabes; a su vez, sentenció el doble racero de naciones como Estados Unidos, Canadá, Francia, Italia, Gran Bretaña y Alemania. “Estos países han estado en contra de nuestro pueblo. Han alentado, de una manera u otra, a una invasión terrestre, pese a que hablan mucho de la protección de los civiles”.

El diplomático hizo un llamado a la conciencia: “si los israelíes quieren que sus niños y niñas duerman tranquilos, también los niños palestinos y las niñas palestinas tienen derecho a dormir tranquilos”.