Mostrando entradas con la etiqueta normas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta normas. Mostrar todas las entradas

miércoles, 14 de agosto de 2024

El momento de empezar


 

Por Marilys Suárez Moreno

Javier tiene tres años y ya campea por sus fueros por toda la casa. Se encarama sobre los muebles, pinta las paredes, tira al piso cuanto objeto encuentra a su paso, arranca las hojas de las plantas. Pero nadie osa requerirlo. “Es chiquito todavía”, se dicen, confiados en que el tiempo y la escuela lo educarán.

Craso error. Es desde las edades tempranas y en el seno del hogar que se deben aprender las normas correctas de convivencia social, por tanto, es un buen momento para iniciarlas y plantear los primeros límites, dado que el niño va creciendo y a los cambios físicos, psíquicos y emocionales se unen otras necesidades: moverse, manipular objetos, explorar cuanto le rodea, jugar, preguntar.

Muchos padres se preocupan por crear buenos hábitos de sueño, alimentación, etc., pero no toman el interés necesario para enseñar al hijo modales de cortesía y formas de respeto mutuo, indispensables para la vida en sociedad. Se precisa, pues, acostumbrarlo a cumplir lo que se le pide y a no hacer aquello que se le prohíbe, además de incorporar a su comprensión el significado del “no se puede”, “no se debe”, “no se toca”. Inculcar esta obediencia demanda que las exigencias planteadas correspondan con sus posibilidades, según la edad.

miércoles, 6 de marzo de 2024

Comportamientos


Por Marilys Suarez Moreno

Los modales como los buenos hábitos, comienzan casi desde que se nace y guardan estrecha relación unos con otros. Las reglas y normas como la corrección y cortesía, definen el comportamiento que los demás esperan de nosotros.

Por tanto, resulta indispensable que los infantes crezcan en un ambiente tutelado por las buenas conductas y la responsabilidad de la familia para hacer lo que les piden y cómo hacerlo. Si ofrecemos o proyectamos dobles mensajes, ellos se sentirán confusos y optaran por imitar lo que vean, sin interiorizar lo que le dicen que es adecuado y correcto.