sábado, 20 de julio de 2024

Economizar en casa

 


Por Aurika Rubio

Cualquier consejo para ahorrar en casa viene muy bien, y pueden ponerlo en práctica todos los integrantes de la familia. Debes tener en cuenta, además, que ayudas desde tu hogar al ahorro del país. Por eso es importante que:

· Planifica la iluminación. Ella representa un alto por ciento del consumo energético. Potencia la luz puntual: la indirecta consume más. Además, si pintas las paredes y el techo de un color claro, ganas en luminosidad.

· Apaga las luces innecesarias, tanto por motivos de seguridad como para evitar un gasto excesivo. Las pequeñas acciones son las que ahorran.

· Limpia bombillas y pantalla, ya que la suciedad absorbe luz y , por tanto, consumes más electricidad para lograr una determinada intensidad. Hazlo a menudo, siempre con las bombillas apagadas. Repite la operación con las pantallas de las lámparas.

· Si dejas los electrodomésticos o el ordenador con el piloto encendido encareces la factura eléctrica entre un 5 y un 10 por ciento. En lugar de apagarlos por el mando, y dejarlos en stand-by, enchúfalos a una regleta con interruptor. Así, con tan solo apagarla los desactivas del todo.

· Revisa las instalaciones. Resulta conveniente para garantizar un uso óptimo de los electrodomésticos y evitar posibles accidentes. Si la casa es nueva, una revisión cada 7 u 8 años basta, pero si tiene más de 20 años, el estudio hazlo cada 5 por lo menos. A casa más longeva, más cuidado en las revisiones eléctricas.

· En la etapa en que los días se acortan, entre las 6:00 y las 10:00 pm, se produce la mayor demanda de electricidad. No solo se encienden las luces de tu hogar, sino también el alumbrado público y la de los centros de trabajo y de servicios. Por eso en este tiempo sé racional con el consumo y ahorraras electricidad en tu hogar y para el país.

· Las persianas súbelas durante el día para que entre la luz del sol y aire la casa de forma natural. Puedes hacer lo mismo con las cortinas, para que la brisa penetre y las habitaciones no guarden humedad.

· Apaga el ordenador. Si no lo vas a utilizar en media hora lo mejor es que lo apagues. Cuando se trate de intervalos cortos también la pantalla, que es lo que más consume. Ten en cuenta que cuando se activa el modo ahorro de energía su consumo se reduce.

· Ventiladores todo el año. Los ventiladores de techo son muy útiles. Como el aire caliente tiende a subir, sus movimientos lo desplazan hacia el suelo, refrescando agradablemente las habitaciones.

· No desperdicies agua. En el baño hay que tener muy claro que el inodoro no es cesto de basura. No tires papeles allí. Se calcula que un 30% del consumo de agua procede del inodoro y que cada persona lo descarga como mínimo mil veces al año.

· Cuidado con las fugas. Se estima que una pila que gotea desperdicia unos 35.000 litros de agua al año. Cuando detectes que pierde agua, cierra la llave de paso, sino lo estas utilizando. Haz lo mismo con el inodoro. Para detectar la fuga, pon unas gotas de colorante en la cisterna.

· No pierdas agua. Mientras te enjabonas en la ducha o te lavas los dientes o las manos, no dejes correr el agua. En un minuto se desperdician unos 10 litros. Si te lavas las manos por ejemplo, no necesitas todo el caudal. Dicen los plomeros que alcanza hasta un gasto de 15 litros por minuto, mientras que con solo 4 o 6 litros por minuto realizas esta operación.

· Al lavar economiza los recursos: llena la lavadora. Si reduces a la mitad las veces que pones este electrodoméstico, ahorras en electricidad.

· Plancha menos a menudo. Acumula ropa, ya que la plancha consume la mayor parte de energía al calentarse. Lo mejor es hacerlo con mayor cantidad de ropa. Así dejas para el calor residual las prendas que los tejidos sean de mezcla o las que solo quieras repasar.

· El refrigerador. Cada vez que lo abres desperdicias un 7 por ciento de energía y hace que la máquina se esfuerce más. Deja enfriar los alimentos antes de introducirlos en la nevera. Y descongela los productos en ella. Así aprovechas su frío y evitas la descomposición de estos. Tenlo lleno, pero con espacio para que el aire circule entre los alimentos.

· Temperatura y ubicación. Comprueba que tu refrigerador este colocado en un lugar fresco y ventilado, alejado de las fuentes de calor. Fija la temperatura entre un 5ºC y 10ºC, y del congelador a 18ºC.

· Congela y envasa. Así no desaprovechas nada. Si cocinas de más, congela los sobrantes por raciones. Alargarás la vida de los alimentos hasta cinco veces.

· A la hora de cocinar, elige las sartenes y las cazuelas de igual o mayor tamaño que los fuegos de la zona de cocción. Evitarás que se desperdicie el calor. Si aciertas con el tamaño reduces un 20% el gasto de energía. Si tapas ollas y sartenes al cocinar, reduces los tiempos de cocción y ahorras.

· Aprovecha el calor residual. En cocinas eléctricas, si apagas el fuego entre dos y cinco minutos antes de terminar un plato, lo acabas de cocinar aprovechando el calor que aún mantiene.

No hay comentarios:

Publicar un comentario