Tomada de Cubadebate
Por Lianne Garbey Bicet
Los cines y espacios públicos de La Habana se prestigian con la inauguración de la 44ª edición del Festival del Nuevo Cine Latinoamericano. Mientras la ciudad se engalana para este evento, es un momento oportuno para reflexionar sobre la impresionante contribución de las mujeres a nuestra industria cinematográfica, un fenómeno que ha dejado una huella indeleble, tanto en la escena nacional como en la internacional.
Lejos de ser solo una celebración de películas y premios, este festival destaca como revolución silenciosa llevada a cabo por directoras, guionistas y productoras. Estas mujeres han tejido narrativas desafiantes, superando estereotipos y redefiniendo el cine cubano. Su trabajo, que refleja y a veces cuestiona las normas culturales y políticas, ha servido como un espejo de nuestra sociedad. En este contexto, el papel de las cineastas ha sido crucial en la creación y la forma de estas narrativas.