Foto: Cubadebate
Redacción Granma
La recuperación no se detiene en todo el país tras el paso de los fenómenos meteorológicos. Restaurar el servicio eléctrico y el abastecimiento de agua a los territorios afectados es la prioridad. Tras el paso del huracán Rafael, se reportan cuantiosos daños en la agricultura, así como en la infraestructura eléctrica y en el fondo habitacional.
El impacto del huracán Rafael tras su entrada y salida de Cuba a través de la provincia de Artemisa, fue devastador para este territorio del occidente del país.
En palabras del propio Presidente del Consejo de Defensa Nacional, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, hay comunidades devastadas completamente; mientras que, en cuanto a los daños eléctricos, es necesario desplegar brigadas de apoyo en ocho de los 11 municipios fuertemente golpeados.
«En Artemisa –remarcó– todo está afectado», señaló el Jefe de Estado.
La infraestructura de la vivienda, con alrededor de 4 933 casas afectadas la mayoría de ellas con derrumbes parciales de sus estructuras y total de techo, y la de Salud Pública, con casi todos los hospitales y algunos policlínicos, se encuentran entre las más golpeadas del territorio, detalló la presidenta de su Consejo de Defensa, Gladys Martínez Verdecia.
Además, unas 40 instituciones del sector educativo sufrieron deterioro, sobre todo en sus techos; y se han constatado también en 174 establecimientos de comercio (74 bodegas), instalaciones productivas y espacios emblemáticos como el Estadio de Artemisa.
Cultivos como los del plátano, la yuca, el frijol y el arroz fueron muy afectados; de las once máquinas de riego fueron dañadas diez; y se perdió todo el tabaco sembrado, aunque se lograron proteger los semilleros. En el cultivo del café, se reportaron afectaciones en 357 de las 640 hectáreas sembradas, con pérdidas de 1.800 latas de café goteado. La fábrica de harina de yuca de la empresa de cítricos Ceiba perdió la cubierta y se registraron daños en la estructura de 8 de las 38 casas de cultivos.
La Zona Especial de Desarrollo Mariel presenta daños considerables tras el paso del huracán Rafael. Desde el jueves en la mañana comenzó la fase recuperativa en las áreas donde se identificaron los mayores daños.
Las instalaciones de la Terminal de Contenedores Mariel fue una de las más afectadas por el azote de este fenómeno meteorológico.
«Los daños podemos decir que son de consideración. Ya dentro del programa de recuperación, comenzaremos con la reanimación del patio por bloques, para dar paso a la activación de la Terminal tan pronto sea posible y activar la entrega de mercancías de contenedores por puerta», explicó José Leonardo Sosa Barrios, director adjunto de Terminal de Contenedores Mariel.
Sosa Barrios agregó que dentro del edificio trabajarán en la relocalización de las áreas con el objetivo de mantener, en esta primera etapa, la vitalidad operativa de la Terminal.
Las principales afectaciones se detectaron en cubiertas, paredes y fachadas de instalaciones como el Parque Solar Fotovoltaico de Guajaibón y la Fábrica de Detergentes Suchel TBV, ambas del grupo vietnamita Thai Binh.
«El huracán se llevó una parte del almacén de materias primas y del almacén de productos terminados, y también el techo de las torres», comentó uno de los trabajadores vietnamitas.
«La fábrica de pañales, que se encuentra frente a la de detergentes, presenta daños similares. Ponemos todo nuestro esfuerzo para poder terminar la recuperación dentro de 14 días», dijo Tu Tranh, presidente del Grupo Thai Binh.
Por otra parte, la fábrica de cigarrillos Brascuba tuvo una de las afectaciones más severas, detalla el informe de la ZEDM. Los daños se constatan en la maquinaria, la cubierta y la chimenea de la caldera.
Robinson Tamayo González, copresidente de Brascuba S.A., comentó que «se levantó el techo del taller de producción de cigarrillos, donde se ubican todas las máquinas productoras del cigarro.
«Casi el 40% del techo se levantó, lo que provocó que las máquinas se mojaran y aunque no está totalmente descubierto, todo el producto terminado, de días anteriores, se encuentran en perfectas condiciones, el almacén no sufrió daños. Son alrededor de 400 millones de cigarrillos que se pueden entregar para el consumo de la población. Nos quedan días duros, de evaluación de daños, de recuperación, de trabajo en la parte mecánica, en la parte electrónica de las máquinas, pero nos vamos a levantar».
Otras afectaciones se localizan en entidades de infraestructura.
La Unión Eléctrica reporta daños en redes de alta tensión que alimentan la Zona. Tras el recorrido de un equipo de la Televisión Cubana, se constató que los directivos de la dirección integrada de proyectos de la Empresa Constructora de Mariel y los de la oficina, se integran a los usuarios y al concesionario para los trabajos de recuperación, a la par que se evalúan los daños de conjunto con la Empresa Esicuba, encargada de resarcir las instalaciones aseguradas.
MAYABEQUE
Siete municipios de Mayabeque fueron notablemente afectados, con énfasis en Quivicán, Batabanó, Bejucal y Melena del Sur, informó al Jefe de Estado la presidenta del Consejo de Defensa Provincial, Yuniasky Crespo Baquero.
Al igual que en Artemisa, las mayores afectaciones tuvieron lugar en la agricultura, en cultivos como los del plátano, la yuca y el arroz.
Se suman los daños a una veintena de centros educativos y a parte de la infraestructura de Salud Pública, sobre todo en los techos. En cuanto a las viviendas, se contabilizan hasta el momento 660 con daños significativos, 63 de ellas derrumbes totales, y en 99 instituciones estatales.
Las inundaciones en Batabanó fueron moderadas y la actividad de la pesca presenta importantes afectaciones.
LA HABANA
En La Habana, puntualizó luego el presidente de su Consejo de Defensa Provincial, Liván Izquierdo Alonso, se produjeron 92 afectaciones en vivienda y once derrumbes.
Además, al menos 71 centros educacionales que sufrieron daños y todas las instituciones de Salud, con algún tipo de afectación.
Los daños en las infraestructuras hidráulicas fueron mínimos; pero la generación de electricidad impidió el arranque de las bombas en las fuentes que abastecen a la capital.
Un día después del paso del huracán Rafael solo llegaba a unos 100 000 habitantes el agua por gravedad proveniente del acueducto de Albear, y que, en lo fundamental, abastece a los municipios de La Habana Vieja, Centro Habana, una parte del Cerro, así como importantes instituciones de Salud. Antes del paso del huracán, ya estaban afectadas con el abasto de agua en La Habana unas 70 000 personas.
Ante la compleja situación, se abastecerían con pipas 62 instalaciones de Salud.
La gobernadora de La Habana, Yanet Hernández Pérez, en conferencia de prensa explicó que entre las principales afectaciones se contabilizaron más de 495 postes en el piso, tanto del tendido eléctrico como de telefonía; y poco más de cien transformadores afectados.
La infraestructura del gas manufacturado también sufrió daños, pues al levantarse las raíces de algunos árboles, se partieron algunas tuberías.
Igualmente fueron afectados los tanques elevados para agua, principalmente las tapas, señala Tribuna de La Habana.
Se reportaron alrededor de 460 derrumbes, entre totales y parciales, principalmente por caída de cubiertas ligeras, paredes y escaleras. Hernández Pérez especificó que muchas viviendas sufrieron daños como consecuencia del propio derrumbe o afectación en otra vivienda cercana.
Entre los municipios con mayor impacto del fenómeno climatológico están Boyeros, La Lisa, Playa, Plaza, Centro Habana y La Habana Vieja.
En La Habana más de 99 000 personas habían sido protegidas en 147 centros de evacuación, en casas de familiares y amigos; y los siete embalses de la provincia lograron mantener su vitalidad durante el paso del fenómeno meteorológico.
ISLA DE LA JUVENTUD
Los daños generales del huracán Oscar en el Municipio Especial Isla de la Juventud están localizados esencialmente en la agricultura, la vivienda en las cubiertas y alguna infraestructura estatal.
En el sector eléctrico las principales afectaciones están relacionadas con líneas partidas debido a la caída de algunos árboles.
En el polo turístico Cayo Largo del Sur son muchos más, debido al impacto directo del evento meteorológico, pero resultan ligeros en sentido general, y se trabaja con ahínco para estar listos al inicio de la temporada alta que debe comenzar este mes y está comercializado en unos 15 días.
Las mayores afectaciones se localizan en el hotel Memories y la clínica internacional, que no ha dejado de prestar servicio y velar por las condiciones epidemiológicas del Polo Turístico.
Es de resaltar el ímpetu de los trabajadores de Cayo Largo, al decir del Presidente de la cadena Gran Caribe Jesús Pérez Balsa: «Emprestur tiene aquí Brigadas de varias provincias como Pinar, La Habana, Santiago, Granma y la Isla, apoyando en diferentes labores. Es un compromiso de los trabajadores de Cayo Largo dejarlo incluso, más bonito, listo para recibir los Turistas en quince días», indicó el telecentro local Islavisión.
Ni el puerto de Gerona, ni las embarcaciones que estaban en su interior, sufrieron daños significativos con el paso del huracán Rafael. Por su parte, el ferry Perseverancia, de mucha importancia para la transportación de pasajeros y de cargas rodantes hacia y desde la Isla de la Juventud, que estaba refugiado en la ensenada de la Siguanea, también reportó un estado favorable, señaló en redes sociales el Ministro del Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila.
El huracán Rafael, cuyo centro transitó aproximadamente a 82 kilómetros de Nueva Gerona, dejó a su paso por la Isla vientos máximos sostenidos de 64 kilómetros por hora (k/h), una racha máxima de 78 k/h y valores en lluvias que no fueron significativos.
PINAR DEL RÍO
La trayectoria que finalmente recorrió el huracán Rafael sobre el territorio nacional dejó a Pinar del Río fuera de su área de impacto, incluso, en el municipio de La Palma, territorio limítrofe con Bahía Honda y ubicado a mas de 70 kilómetros del punto por el que salió al mar este organismo tropical, hubo pocos efectos, informó el Periódico Guerrillero.
El consejo popular Manuel Sanguily era uno de los asentamientos más amenazados, inclusive, se previó su total evacuación ante la ocurrencia de intensas lluvias y el volumen de agua almacenado en la presa Mártires de La Palma, que incrementaba el riesgo de inundación para el poblado.
La mayor secuela del ciclón fue se desconectó el Sistema Electroenergético Nacional (SEN) y, en consecuencia, se debieron garantizar los servicios básicos a la población con diferentes alternativas, muchas de las cuales estaban activadas antes de la amenaza ciclónica.
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