jueves, 11 de julio de 2024

Bertina Felipe Castro: Mujeres protagonistas en las montañas santiagueras


Por Marilys Zayas Shuman y Lianne Garbey Bicet

El nombre de Bertina Felipe Castro es muy conocido, tanto en el Tercer Frente Oriental como en el quehacer de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) en Santiago de Cuba. Su dedicación y liderazgo han sido protagonistas de varios trabajos periodísticos en diversos medios de prensa de nuestro país. En especial, la revista Mujeres ha dedicado algunas de sus páginas a visibilizar la incansable labor de una Mariana de estos tiempos.

En una oportunidad anterior, la colega Aimé Sosa Pompa decía que conversar con ella era "como encontrarse con una corriente de río vigorosa y clara, mientras se desanda bien acompañada por un verde lomerío". Así nos sentimos durante esta entrevista, pues en cada una de sus palabras se dibujaba un paisaje de su montañoso municipio y llegaba el convite para cruzar varios pasos de ríos, en aras de conocer la realidad de las mujeres de allí, donde apenas transitan los carros y por sobre todas las cosas era visible el amor a la Patria y el compromiso con la Revolución.

"Nuestro municipio es un territorio que tiene ocho Consejos Populares (CP), fundamentalmente tiene dos muy intrincados, que son el de La Tabla y el de Las Bocas; para llegar hasta allá hay que cruzar varios ríos. Las comunidades están dispersas una de la otra y el renglón fundamental es la producción de café y cacao... Tercer Frente es un municipio netamente montañoso, 100% obra de la Revolución, pues es el frente fundado por Juan Almeida Bosque, donde resuena su famosa frase 'aquí no se rinde nadie'. Peso con mucho orgullo nosotros honramos su memoria y también la del Padre de la Patria Carlos Manuel de Céspedes, cuyos restos reposan en la comunidad de San Lorenzo; y, por supuesto, la del doctor Mario Muñoz Monroy, que es el nombre que lleva el frente", decía Bertina al inicio de nuestro diálogo.

Reconoció la dificultad de estos tiempos y su gran impacto en nuestras vidas. "Siempre las mujeres somos las más afectadas, porque somos vencedoras de imposibles; además de la carga del trabajo, llevamos las riendas de la casa, siempre estamos buscando ideas para hacer algo diferente".

Precisamente Bertina y las federadas de su municipio son conocidas por marcar la diferencia en el trabajo comunitario y la atención a la mujer y las familias.



“En Tercer Frente contamos con una brigada de las Marianas, integrada por 50 mujeres de diferentes profesiones y sectores: enfermeras, maestras, sanitarias y muchas jóvenes. Esa brigada radica en la comunidad de San Rafael de Cruces de los Baños y, desde los inicios, apoyaban por cuenta propia todas las movilizaciones del café. Fue abanderada oficialmente como brigada las Marianas a raíz de que el municipio tuvo una necesidad de plantaciones nuevas de café y ellas llegaron a sembrar un millón de posturas, había que ver cómo nos montábamos en los camiones a las 5 de la mañana para ir a la tarea".

¿Alguna experiencia en particular que recuerde y quiera compartirnos?

“La brigada lleva un lema 'Con COVID sin COVID, las Marianas estamos aquí', que se hizo fuerte cuando la pandemia, por todo lo que hicieron. Ellas se vincularon a la zafra cafetalera, atendiendo enfermos, familias vulnerables, hicieron de mensajeras buscando la comida en la tienda; hay que ver cómo esas mujeres estuvieron en todas, pero además aportando alimentos de su propia agricultura urbana para los Sistemas de Atención a la Familia ( SAF).

“En ese tiempo, una profesora jubilada atendía a las niñas y a los niños para que las madres salieran a trabajar y se vincularan a la zafra vegetalera a través de viveros. A esos niños los vinculaban a los canteros, sembraban frutas y de todo para inculcarles amor por la tierra. Como somos un municipio netamente montañoso, hay que inculcarle eso a las niñas y a los niños porque todos no pueden ser médicos, maestros o ingenieros...”

¿Cuáles son las principales líneas de trabajo que están asumiendo desde la FMC?

“Nosotros no teníamos hogar materno y ya lo tenemos. Ahora estamos trabajando por mejorar la situación del empleo allá en la loma. Por ejemplo, hay mujeres en Las Bocas que se montan en una red de mulos, cargan su café porque eso es lo que hay, porque no hay empleo allí. Cuando usted va, lo que ve es una tienda que tiene una dependiente y, para ocupar esa plaza, hay que esperar a que la que está se jubile; para trabajar en la escuela tiene que ser licenciada, en el consultorio tiene que ser el médico y lo otro que queda es el comedor comunitario. Ya no hay más empleo para las mujeres.

“Por eso estamos buscando crear una minindustria con las mujeres de la zona. Ya en el Centro Productivo del Laurel se ubicaron ochenta y pico de mujeres a las que se les dio empleo. Pero también estamos pensando en cómo podemos incrementar las casitas infantiles, para poder ayudar a nuestras propias mujeres que están en el campo.

“Ah, otra cosa fundamental en la que estamos trabajando es el proceso de regreso a la base con sus cuatro elementos fundamentales. En primer lugar, la producción de alimentos, el tema de la distorsión, impulsar la economía y el trabajo político ideológico. Para eso nos apoyamos de la emisora y su programa "Encuentro", con el que llegamos, junto a los periodistas, a las comunidades más intrincadas.

Con relación a la atención social, sabemos que hay realidades que afectan a nuestras comunidades, ¿cómo se tratan desde la prevención social?

“En los temas de prevención social se ha fortalecido el trabajo de la Casa de Orientación a la Mujer y las Familias, con una psicóloga que atiende salud mental y los temas de violencia. Nosotras también damos charlas sobre las causas y consecuencias que tienen las drogas y el consumo de otros tipos de fármacos en la vida de las personas.

"Además, organizamos los círculos adolescentes en cada uno de los Consultorios de la Familia y los vinculamos con el médico y todos los factores de la comunidad.

"Preparamos a las dirigentes de base, en temas como el acompañamiento a aquellas personas que sabemos que son alcohólicas, entre otras situaciones".

Imagino que este tipo de experiencias le sirve para atender diferentes líneas de trabajo.

“Sí, de esta manera atendemos a personas en situaciones de vulnerabilidad, con una situación económica difícil. Nos vinculamos con el trabajador social que está en la comunidad para que haga la visita y así vamos visualizando los casos.

“Para eso tenemos el proyecto Vitamina de Amor, que lo estamos llevando a todos los barrios para recopilar recursos de todo tipo, lo que hacen las mujeres creadoras; lo que le falta a los niños y niñas para ir a la escuela, desde la merienda hasta el material escolar; las jabas que les hacemos a las familias vulnerables... Porque el mejor trabajo se hace hombro a hombro, porque ahí usted ve la cara de la persona, tiene la posibilidad de compartir cuáles son sus ideas, cómo piensa, cuáles son sus preocupaciones, ver las condiciones de su vivienda.”

Bertina, ¿y para usted qué significa ser la secretaria general de la FMC en el municipio Tercer Frente?

“Para mí significa firmeza. Hoy el reto es fuerte, la situación es difícil, el compromiso es saber que no tienes horario de descanso, ni de día, ni de noche; porque cada minuto hay que tocar una puerta, hay un caso que atender, una familia que visitar; porque la labor fundamental de nosotras es la atención a la familia y la defensa de la Patria.

“¿Y cómo se defiende? Haciendo cada una lo que nos toque, siendo más sistemáticas, logrando mayor vínculo con la comunidad para saber cómo piensan las mujeres, cuáles son sus necesidades, cuáles son sus ideas, cómo quieren que sea nuestra organización. Pero hay que ir allí, porque el combate se gana en la comunidad, ¿con quién?, con las familias que están allí, porque detrás de un buró no se resuelve nada.”

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