Texto y fotos: Natasha Salomé Tachín Sarría
Con motivo de la celebración de sus 504 años, la Villa de San Cristóbal de La Habana y la oficina del Historiador de la Ciudad (OHCH) desarrolló un amplio Programa de actividades.
Las tres vueltas a la ceiba y la tradicional procesión de la Virgen de La Caridad. Esta vez por la calle Obispo con una pequeña parada en El Templete formó parte de las celebraciones.
En la esquina de las calles Cuba y Luz en el edificio de la Real Proclamación se entregaron las llaves de las viviendas a familias que residían en hogares de tránsito, a personas en situación de discapacidad y a una joven madre con cinco hijos.
Para la ocasión, el acuario de la (OHCH) reabrió sus puertas luego de una reparación capital, llevada a cabo por la dirección de Inversiones de la (OHCH) con el apoyo de especialistas del Jardín Botánico Nacional y la Quinta de los Molinos.
El proyecto Karibuni realizó una expoferia con diferentes formas de emprendimiento en su espacio habitual en la calle San Ignacio.
Por su parte, abuelos y abuelas del proyecto cantaron y realizaron una pasarela junto a las alumnas de la Maestra de modelaje Gisleda de la Barca Vega en la calle Obispo.
La casa museo de la Obra Pía, ubicada en la misma manzana, exhibió la muestra transitoria ‘’Vestir a lo antaño’’, una colección de piezas desde el siglo XIX hasta la fecha.
La muestra estuvo conformada por prendas y objetos que eran utilizados según la ocasión, marcando la diferencia entre las clases sociales y representadas en la transición de un siglo a otro.
La Casa Museo de África en su espacio Griot presentó un Taller de capoeira para niños, y un espectáculo titiritero, culminando la tarde con la presentación del grupo Descendencia Rumbera.
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