miércoles, 20 de septiembre de 2023

Palabras al vuelo

 



Por Marilys Suárez Moreno

Ciertamente, las palabras son esenciales en la vida de los seres humanos, pues constituyen el medio de comunicación y de persuasión por excelencia, además de ejercer influencia sobre el individuo desde la más tierna infancia.

Todas las personas poseemos una capacidad innata para hablar, pero el desarrollo y formación del lenguaje sólo será posible si existe un entorno social que estimule al niño o niña a construirlo de modo activo y progresivamente.

Aprender a hablar es una muestra de los avances del bebé. Escucharloedecir por primera vez “mamá”, papá” produce una sensación indescriptible de felicidad. Pero para que este momento llegue, antes pasará por otras etapas, aunque ya desde su primer día de vida se comunica con el mundo que le rodea, a través del llanto y la sonrisa.

Este proceso no es igual en todos los infantes. Por causas diversas, algunos aprenden a hablar más rápidamente que otros. El conocimiento lingüístico en las y los bebés, desde los primeros meses de vida, es importantísimo, porque el lenguaje interviene en los procesos de cognición, memoria, atención y, por lo tanto, tener un buen desarrollo en este campo implica tenerlo también en muchos otros.

De no ser así, se restringe la capacidad de expresión del menor para relacionarse con los demás y, por ende, limita su autoestima.

Gracias a las inflexiones, el lenguaje expresa no sólo las ideas, sino también los sentimientos y hasta las emociones.

Al hablar a un niño o niña no se le enseña únicamente a expresarse, sino también a vivir, reaccionar y, sobre todo, a comunicarse con los demás.

Si comprendiéramos, realmente, la influencia de nuestras palabras en la educación de los hijos, pondríamos más atención en lo que decimos y, sobre todo, en la manera de decirlo.

A través del aprendizaje del lenguaje, influimos directamente en el desarrollo mental del infante, pero también en su cultura e integración social.

De hecho, los niños aprenden a hablar y a comprender el significado de las palabras en la convivencia con los adultos que se comunican con ellos y estimulan sus esfuerzos en este sentido.

Si bien todos pasan por las mismas etapas de desarrollo del lenguaje, cada uno avanza a su propio ritmo, es decir, unos aprenden más rápidamente que otros, tal como sucede en las distintas etapas de la vida.

Aprender a comunicarse con sus padres es uno de los tantos logros del bebé; pero, en ese largo proceso de aprendizaje, hay que tener en cuenta siempre que es muy necesaria la adecuada estimulación.

Cuando un niño o niña habla, bien puede razonar perfectamente y no le cuesta interpretar la información recibida por los que le rodean.

Si falla en el lenguaje, no quiere decir que carezca de capacidad intelectual, pero es cierto que el lenguaje es una herramienta que está bastante relacionada con el desarrollo de la inteligencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario