Artemisa unida para sostener voluntades.

Por: Marilys Zayas Shuman, Lianne Garbey Bicet y Aime Sosa Pompa
Fotos: Germán Jardinot Bauta

Equipo de varias organizaciones del territorio  después del intercambio para continuar recuperando Artemisa

Los impactos del huracán Rafael sobre Artemisa todavía impresionan. En el camino a la capital municipal, las imágenes desbordan los asombros, porque al alcance de nuestra vista parece que se hizo realidad esa mítica historia de gigantes jugando bolos en el cielo, y estos después fueron a dar con furia al occidente de la isla. 

 

Sede de la FMC municipal en Artemisa con peligro de derrumbe

No es una historia de dioses la que esperábamos encontrar en el más reciente recorrido de dirigentes  de la Federación de Mujeres Cubanas, pero sí fueron tenaces las vivencias de sus protagonistas, que hacen gala del nombre de diosa que lleva esta tierra cubana. Nadie duda que Rafael puso a prueba a toda la comunidad, y al mismo tiempo resaltó la disposición para unirse ante la adversidad. Los recibimientos fueron con abrazos de apretado corazón, el hacer no se hizo esperar y hasta un desyerbe en uno de los organopónicos de la ciudad fue una manera más de fortalecer brazos y voluntades crecidas.

Desde el principio y sin cruzarse de brazos, Zonya Rivero, Segunda Secretaria de la FMC nacional y al frente de esta comitiva, destacó la resiliencia de este pueblo y reconoció el papel crucial desempeñado por la comunidad en el proceso de recuperación tras el paso del fenómeno meteorológico; mientras entregaba donaciones de una valija especial. “La victoria que tenemos nosotras es el reconocimiento al papel de nuestro pueblo que aún, siendo afectado se incorpora a las actividades de recuperación y todas las prioridades que, desde los consejos de defensa de zona del municipio y provincia se convocan”, comentó en el intercambio con las artemiseñas.

Zonya Rivero, Segunda Secretaria de la FMC nacional conversa con Taimí Duarte Fernández representante de la FMC y Nadia María Toca Hernández, secretaria de la CTC en Artemisa.

De igual manera, a la par que agradecía la valentía que se había demostrado, enfatizó en la importancia de que la familia, como célula fundamental de la sociedad, protagonice cada una de las acciones de recuperación, siendo parte esencial del esfuerzo colectivo que realizan las autoridades de la provincia y el país para regresar a las actividades cotidianas lo más pronto posible. "Es fundamental que todos y todas estemos al tanto de la percepción de riesgo y seamos proactivos en proteger nuestros espacios y recursos", enfatizó.

Durante el recorrido también se participó en el saneamiento y trabajo en el organopónico

 De visita a la sede de la organización, mientras compartía ideas, la líder señaló la necesidad de resguardar las instalaciones, tratar de resarcir los daños con los recursos propios y mantener la vitalidad de sus espacios como el salón de la Casa de Orientación a las Mujeres y las Familias “...para que sigan siendo un refugio para nuestras familias y para el desarrollo de actividades que nos fortalezcan como comunidad. Ahora lo que tenemos es que atender a las familias que están en una condición más complicada que nosotros, pero institucionalmente también tenemos la responsabilidad de borrar esa huella del huracán en el lugar”, ponderó.

En ese momento de aparente descanso después de las actividades de apoyo, Rivero también recordó la inminente conmemoración del 66 aniversario del triunfo de la Revolución, que comenzará el 17 de noviembre y se extenderá hasta el 17 de enero. "Es un momento para celebrar la vida y la esperanza, sobre todo porque no hemos tenido que lamentar pérdidas humanas tras el huracán. Esa es nuestra mayor motivación en estos días difíciles", afirmó.

Asimismo, hizo un llamado a la comunidad para que se unieran a las tareas de saneamiento y recuperación, resaltando el hecho de que el trabajo conjunto es esencial para avanzar. "Tenemos que establecer un vínculo diario con nuestras familias, para recordarles que no están solas y que sus problemas serán atendidos. A pesar de las limitaciones, debemos seguir adelante, reconociendo el enorme poder que tenemos como comunidad y el compromiso en esta labor de reconstrucción", comentó.

La jornada no solo sirvió como un espacio para la reflexión y la planificación, sino que reforzó la idea de que, en momentos de crisis, la solidaridad y el papel activo de cada miembro de la comunidad son esenciales para superar adversidades y soñar con un futuro mejor. Bajo esta premisa se hizo entrega de un donativo con objetos y artículos de primera necesidad para las dirigentes y trabajadores  damnificados y se extendió la convocatoria a propiciar encuentros similares con las integrantes de la federación en las otras dos provincias afectadas La Habana y Mayabeque.

El abrazo: brazos que ayudan a sostener voluntades. Taimí Duarte Fernández, Secretaria General de la FMC en Artemisa recibe e Marilys Zayas Shuman, directora de la Editorial de la Mujer.

 Acciones de la Federadas artemiseñas en apoyo a la recuperación

En medio de todo el caminar, la limpieza y la atención a las que llegábamos a aportar aunque sea unas horas de amplio apoyo, pudimos conversar con Taimí Duarte Fernández, Secretaria General de la provincia. Desde las primeras horas de la fase de recuperación, la FMC en Artemisa se organizó en brigadas con los CDR para apoyar las tareas orientadas por el Consejo de Defensa, como la recogida de escombros y limpieza de las calles de la ciudad para facilitar el comienzo de las labores de las brigadas de la Empresa Eléctrica.

“También visitamos los centros de evacuación donde le hemos dado atención diferenciada a las familias más afectadas”, explicó Duarte. Entre las instituciones recorridas estuvieron las instalaciones de Güira y Alquizar, esta última con alrededor de veinte menores de edad evacuados. Además de chequear las condiciones del lugar y organizar los aseguramientos se entregaron donativos para el personal damnificado.

“Son familias que perdieron todo, que no retornarán a sus viviendas y le estamos dando seguimiento conjuntamente con el Consejo de Defensa en la provincia, el municipio y la Zona de Defensa para ver entonces el destino que van a tener y de qué manera nosotras podemos seguir contribuyendo en la atención, la ayuda, la colaboración a estas familias más afectadas”, agregó.

La recuperación de los centros educativos ha sido otra prioridad para la FMC. A pesar de los daños significativos en las infraestructuras escolares, las federadas han trabajado arduamente junto a los Consejos de Dirección de las escuelas, maestras y padres, para devolverle la vialidad a estos espacios. Gracias a este esfuerzo conjunto 42 instituciones de la provincia retomaran las actividades docentes.

Taimí explicó, además, que también se ha brindado apoyo a las trabajadoras y líderes de la organización afectadas tras el paso del huracán: “Nosotras por supuesto nos personamos en sus casas y le ayudamos a organizarse con sus propios recursos. Porque la mayoría fueron afectaciones parciales de techos, entonces con las fibras que pudimos ir recuperando, fuimos contribuyendo para recuperar sus viviendas. Además, tenemos dos instituciones que son las más afectadas, una de ellas donde radica la federación  del municipio Artemisa en la cual en estos momentos no se puede ni reincorporar los trabajadores porque tiene peligro de derrumbe y ¿qué estamos haciendo? Desde la propia provincia estamos reubicando una oficina para que las compañeras de la sede municipal puedan continuar la labor y resguardar la documentación y los recursos”.

Mientras esperan por la llegada de recursos que les ayuden a recuperar sus instalaciones, la Federación de Mujeres Cubanas en Artemisa trabaja en estrecha coordinación con otras organizaciones e instituciones. En cada una de las responsabilidades que asumen durante la recuperación, además del esfuerzo, son portadoras de un mensaje de aliento y solidaridad para quienes encuentran a su paso.

Zonya Rivero conversa con trabajadoras y representantes de la FMC en Artemisa

“Nadie va a quedar desamparado, este es un proceso  lento porque sabemos que la provincia ha sido muy destruida, sobre todo muchas viviendas afectadas, muchos problemas con la electricidad, las torres de alta tensión están en el piso, con el abasto de agua. Por eso le digo a nuestras federadas mucha confianza en la Revolución. No vamos a quedar desamparadas pero sobre todo, las convoco a  incorporarse a la recuperación. Esta es una tarea de todas y con nuestro granito de arena todas debemos aportar. Y estamos convencidas que mientras más aportemos más rápido va a ser la recuperación de la provincia de Artemisa, seguras estamos que se levanta porque como dice nuestro lema. <<Hay sangre de Artemisa brillando la bandera y la bandera seguirá flotando victoriosamente>>”.