Por Valia Valdés
La perspectiva de género trasversaliza la creación artística y late como una herida abierta en las sociedades contemporáneas. Masculinidades tóxicas, relaciones dependientes y acoso, resultan ejes polémicos de Corazón blanco, nuevo telefilme de Eduardo Eimil que será estrenado en el espacio “Una calle, mil caminos”, dentro de la programación de verano.
El realizador partió del guion de Lil Romero para referirse al patriarcado y las manifestaciones machistas que generan comportamientos dañinos. Según Eimil, el título del dramatizado responde a ciertas cualidades positivas del protagonista, quien se deja arrastrar por atavismos y prejuicios.