Caricatura Osval
Por Lisandra Pérez Coto
Nací en febrero, “el mes del amor” y mencionar la fecha entre amigos o conocidos muchas veces provocaba respuestas comunes: vaya, te ganaste dos regalos seguidos o por el contrario ahora te combinan los dos, refiriéndose, claro está a la manida campaña de chocolates, flores y detalles lujosos al estilo comedia romántica hollywoodense, que prueben el amor hacia nuestras parejas.
La asociación siempre me ha divertido un poco. En parte porque aunque prefiero andar al margen de las expectativas sociales y lo kitsch de la fecha, casi siempre lo celebro.
No obstante, el núcleo del asunto no es si celebrar, o no, si regalar o elegir no hacerlo. El tema sobre el que colocamos hoy nuestra mirada es el amor romántico, ese mito que consciente o inconscientemente nos inocularon y que invita a creer, entre otras muchas mentiras, en que es necesario probar el amor, sufrir por él, someterse…